Seguro que las has visto en los árboles, pero, ¿qué sabes sobre ellas? Las ardillas son pequeños roedores, de la categoría de los mamíferos. Las ardillas se pueden conseguir ver en gran parte del mundo, suelen vivir en árboles o en la tierra y se alimentan fundamentalmente de fruta y semillas.
Hay más de 200 especies diferentes de ardillas, por lo que es una familia bastante extensa, y se suelen clasificar en tres tipos:
- Ardillas arborícolas: son aquellas que viven en los árboles, ya sea en pequeños nidos o en el interior de ellos.
- Ardillas terrestres: viven bajo la tierra, en madrigueras hechas por ellas mismas.
- Ardillas voladoras: aunque el nombre lo parece, estas ardillas no vuelan como tal, solo que tienen unas bolsas a sus lados que les permiten desacelerar su caída, lo que hace que parezca que pueden volar.
Al ser tan numerosas, al igual que ocurre con los perros y los gatos, existen diferentes tipos de ardillas: como la ardilla roja, la ardilla gris, las marmotas, los perritos de la pradera o la ardilla negra. Pero lo que más distingue a las ardillas es su cola larga y peluda, además de sus cuerpos estirados y sus movimientos rápidos.
Qué comen las ardillas
Las ardillas y la comida tienen una relación bastante estrecha, y es bien sabido que a ellas les gustan mucho las nueces, aunque pueden llegar a comer frutos secos en general, otras frutas jugosas e incluso… ¿carne?
Pues sí, ya que en realidad las ardillas son omnívoras, es decir, que comen plantas y carne. En el caso de la carne, ellas pueden comer insectos, caracoles, e incluso los huevos de algunas aves. Se conoce incluso el caso de algunas ardillas que han comido carne de animales más grandes, pero solo cuando no logran conseguir frutas o semillas, por lo que lo hacen como método de supervivencia.
Al igual que otros roedores, las ardillas son incapaces de vomitar o eructar y no sufren acidez estomacal, es decir, no es común que tengan dolores de estómago. Y, como los osos, las ranas, las aves y las tortugas, ellas también hibernan, por lo que suelen buscar mucho alimento para pasar tranquilas el invierno; no obstante, no lo hacen todas las especies, solo unas cuantas. De esta misma manera, las ardillas usan un sistema llamado ‘acumulación por dispersión’ que les permite almacenar cantidades pequeñas de alimento en diferentes sitios, y así pueden estar más seguras de que los ladrones no entrarán a quitarles su comida.
Las ardillas, junto con las aves y muchos otros animales, ayudan también a la reforestación de los bosques, ya que dispersan varias semillas por todas partes (de bosques y selvas) haciendo que crezcan árboles.
Dónde viven las ardillas
Las ardillas pueden encontrarse en muchas partes del planeta. ¿Ya las has visto alguna vez? ¡Pues debes saber que se pueden encontrar en muchos parques alrededor del mundo! Como en el Parque del Retiro en Madrid (España), por ejemplo, o en Central Park en Nueva York (EE.UU.).
Otros datos curiosos sobre las ardillas
- Son de los roedores más ágiles que hay. Pueden trepar y saltar árboles en solo unos segundos.
- En algunos sitios ha habido incluso plagas de ardillas, pues tienden a mordisquear objetos metálicos y plásticos, dañando propiedades humanas. Además, suelen alterar plantaciones al enterrar sus alimentos en zonas privadas.
- Sus dientes nunca dejan de crecer. Ya que sus dientes son sus mejores herramientas, siempre los andan utilizando, así que tienden a desgastarse, y es por eso que para mantenerlos siempre útiles y que no crezcan de más, suelen morder cosas duras.
- Tienen sentidos aumentados. Las ardillas tienen un buen sentido del espacio, por lo que siempre están alerta de posibles enemigos y eso hace que sea muy difícil el poder acercarse a ellas por más silencioso que seas. Además, pueden reconocer nueces y saber si están buenas con tan solo olerlas, es decir, que tienen un súper olfato.
- Las ardillas de tierra, como los perritos de la pradera, pueden crear civilizaciones completas compuestas por túneles gigantes que albergan cientos de estos miembros. ¡Increíble!
