Una de las montañas más bonitas de Sudamérica se encuentra en Argentina y se denomina Aconcagua, por lo que es muy visitada por turistas y alpinistas, porque su ascensión es sencilla y permite que muchas personas la hagan durante todo el año.
La hermosa montaña Aconcagua es muy conocida en el cono sur latinoamericano, pero no tanto en otras partes, así que ahora es tu oportunidad de conocer más sobre esta magnífica montaña, la más alta de toda América.
Características generales del Aconcagua
El Aconcagua es la montaña más alta de América y está incluida en el grupo de las Siete Cumbres, que engloba a las montañas más altas de cada continente en el mundo.
El Aconcagua tiene una altura de 6.960,8 metros con coordenadas de 32°39’13’’S y 70°00´40’’O, y se ubica en el Parque Provincial Aconcagua, en la provincia de Mendoza, en Argentina, aunque su base se encuentra entre Argentina y Chile.
El Aconcagua se compone de dos cumbres, una al norte y otra al sur, que están conectadas por una cresta llamada “Filo de Guanaco”, que mide un kilómetro de longitud aproximadamente.
En la superficie, el Aconcagua tiene algunos glaciares que no son tan pronunciados como los que están en la Patagonia, como Los Polacos, que es el camino de ascenso más común de la montaña, o los Horcones Inferior y Superior en el lado este.
Formación del Aconcagua
La montaña del Aconcagua tiene un origen volcánico, pero curiosamente no es un volcán. Su origen se produjo cuando la corteza terrestre se hundió debajo de la Placa Sudamericana, tras colisionar ambas. Poco después de este choque las montañas andinas empezaron a emerger de la superficie, como consecuencia de la orogénesis de la Cordillera de los Andes.
La montaña del Aconcagua tiene tres periodos de desarrollo:
- El primero fue antes del Jurásico, con las rocas sedimentarias más antiguas en su base y rocas más jóvenes en sus flancos.
- El segundo fue en el Mesozoico, donde los movimientos tectónicos plegaron las rocas sedimentarias formando los pliegues actuales.
- El tercero fue durante el Cenozoico, con apilamientos de depósitos y materiales de glaciares que fueron arrastrados por la lluvia, que incrementaron la altura de la montaña.
Ascensos del Aconcagua
Esta montaña del Aconcagua es muy visitada por escaladores de todo el mundo, con una entrada de aproximadamente 7.000 visitantes por temporada, extendiéndose entre los meses de marzo a diciembre.
Desde su parte norte, el Aconcagua es relativamente sencillo de subir mediante el camino habitual del noroeste, donde no hace falta tener un gran conocimiento de técnicas de escalada, aunque los efectos de la altitud pueden ser muy severos, ocasionando “apunamiento” o mal agudo de montaña entre algunos escaladores.
La ascensión al Aconcagua no requiere de oxígeno, a pesar de que el clima puede tener cambios bruscos y pasar de un clima apacible a un clima tempestuoso y con fuertes vientos en poco tiempo.
Parque Provincial Aconcagua
La montaña del Aconcagua, como veíamos, se encuentra dentro del Parque Provincial Aconcagua, que fue nombrado como tal por el gobierno argentino en 1983 con la intención de proteger la montaña y sus alrededores, así como sus recursos naturales y culturales.
Esta montaña del Aconcagua ha sido lugar de muchos rituales incas, por lo que se considera que es un lugar sagrado para ellos. De hecho, allí se han encontrado restos de cuerpos humanos y animales que fueron objeto de sacrificios incas a lo largo de la historia.
En el parque también viven algunas especies naturales que se han adaptado a las bajas temperaturas, como la escarapela y la leña amarilla. En cuanto a la vida animal, en el parque del Aconcagua pueden observarse pumas, zorros, guanacos, lagartijas, sapos, liebres y algunas especies de halcones y águilas, que se han acostumbrado a vivir por debajo de los 4.000 metros de altitud.
